Pues sí: Allá por 1987 cayó en mis manos El Hechicero de la Montaña de Fuego.
Lo pillé en la biblioteca del colegio y me lo llevé a casa. Un día seco de invierno lo bajé a la calle con unos dados, un papel, lápiz y goma. No había nadie de la pandilla, pero me puse a esperar leyendo el maldito libro, como antesala a alguna partida de brilé, futbito, polis y cacos o de O que dixo meu Rei.
Al rato llegaron dos de la pandilla con los que me llevaba mucho (y que luego formaron mi primer grupo de roleros), algo más pequeños que yo, que me preguntaron que qué hacía. Les conté un poco, pero no entendieron. Y ahí vino el "... por ejemplo". Leí los primeros párrafos y, al llegar a las elecciones les di la palabra. "Pues vamos por ésta", dijeron. Pasé las páginas y leí el siguiente apartado. Y el siguiente, y el siguiente.
Cuando se encontraron con el primer monstruo les dije: "... y ahora se tiran dados". Ellos por el protagonista, yo por el monstruo. Unos pocos golpes, y muerto el bicho. Y seguimos un rato más, hasta que oscureció y tuvimos que dispersar el grupo.
Al día siguiente me buscaron y me dijeron de seguir jugando. Seguimos con la misma dinámica: yo leía y tiraba dados por los bichos, ellos elegían y tiraban por el protagonista.
Al llegar al laberinto lo dejamos, porque les resultó imposible. Pero una semilla germinó en nuestras cabezas que hizo que comprara otros libro-juegos y acabara cogiendo el sistema de 2d6 con Destreza, Resistencia y Suerte, y haciendo un juego propio: La Espada de las Gemas Mágicas, mezclando tablero y rol, con un demonio que sólo moriría bajo la Espada de las 7 Gemas (elegías clase de personaje, te movías por el tablero buscando las gemas en cada casilla, en las cuales había pueblos, posadas, bosques, grutas). Luego las engarzabas en la Espada y a por el Demonio. Tenía de rol lo que un Heroquest avanzado jugado por niños, pero me sentí muy orgulloso de ese juego, hijo directo de un Libro-Juego.
Los que más me gustan son los de Lucha-Ficción (tengo unos 10), pero los de Ad&d y D&D, la Máquina del Tiempo (el de la pluma del arqueópterix era genial) y los de Planea tu Fuga de Frome también me ayudaron a coger gusto por la lectura.
Los que más me gustan son los de Lucha-Ficción (tengo unos 10), pero los de Ad&d y D&D, la Máquina del Tiempo (el de la pluma del arqueópterix era genial) y los de Planea tu Fuga de Frome también me ayudaron a coger gusto por la lectura.
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