miércoles, 15 de junio de 2022

Forbidden Lands: Justicia

Cervus el constructor tenía varios encargos.

Terminar el templo monóptero de techo abierto en Tyr Melián era uno. Tendría que reparar la torre; ése era otro. Campos de tiro con arco y de lucha para la guardia de la torre; ése no era prioritario, pero que no se te olvide.

El santuario a Cuervo mirando al mar, en Tyr Melián

También vino el patíbulo. Tuvo orden de montarlo en la salida norte de Boldhome, cerca de los campos de centeno, donde las piedras en círculo sagradas. Allí ajusticiarían, ante todos los del pueblo que quisieran asistir (excepto los niños; los Cuervos de Plata fueron muy claros), a los soldados del sur que atacaron Lejano Vivend desde su barco. El Hermano de Herrumbre sufriría otro destino. 

En un sueño visionario Ídril entendió que Cuervo quería que el Hermano fuera sacrificado en el bosque de Aurakal, donde el cementerio. 

Cementerio del Bosque de Aurakal

Así se habría de hacer dos días después, junto con Tháendan y Kurt: el ritual acabaría arrancando el corazón del monstruoso Hermano, corazón que resultó una esfera de un metal extraño y oxidado que, al tacto, aportó Voluntad al medioelfo como extraída de un lugar lejano. El óxido abandonaría la esfera tras el ritual, entendiendo Ídril que era un artefacto traído por su dios.

jueves, 2 de junio de 2022

Forbidden Lands: Mentes Fundidas

Ídril les sacó toda la información que pudo a través de un ritual de lectura mental.

Supieron que vinieron en un barco largo desde un lugar llamado Falender. Allí vio imágenes de un enorme hombre en armadura, con la cara cubierta por una máscara cadavérica: era Sir Ardric, gobernador de Vivend. Bendijo su partida y les dio órdenes. Serían los Castigadores de Ardric. Dos Hermanos de Herrumbre con sus grifos, dos Guardias de Hierro con dos grupos de 5 soldados a su cargo; además llevaba a 2 ayudantes para ocuparse de la intendencia.

Sir Ardric de Falender

Luego atravesando un gran lago. Luego llevaron el barco a través de una llanura hacia un gran delta llamado El Rubor. Pequeños islotes pantanosos cubiertos de niebla fueron el paisaje del viaje durante un tiempo. Seres humanoides pero sauriales atacaron la expedición, pero los de Herrumbre lograron salir sin demasiado problema. Rodearon luego un islote cubierto de brumas (¿el Refugio mítico de Maidenholm?) poblado por lo que parecían gentes élficas.

Luego, ya llegados al Norte, empezaron a masacrar poblaciones ailanders.

Decidieron ir al día siguiente Tháendan e Idril a Boldhome y mandaron a Cervus el Constructor que, tras rematar el templete circular  de piedra que iban a dedicar a Cuervo en Tyr Melián, preparara un cadalso.

En Boldhome se encontrarían al Hermano que había escapado intentando atacar el pueblo con maldiciones y con su grifo. No sin dificultades, y con el elfo maltrecho, acabarían con la criatura y capturarían al sacerdote maligno, custodiándolo en la Casa Grande de Boldhome.