Como máster quiero que la aventura genere implicación, curiosidad, empatía y algo de adrenalina. Pero también quiero metatrama, aventureros buscando su propio destino sin necesidad de cargarse el grupo. Búsquedas personales de poder, magia, recursos. Que me manden un mail entre semana preguntándome que dónde puede haber un herrero capaz de ensamblar las escamas para hacer una armadura de dragón, o cuándo estarán de nuevo los planetas alineados para el ritual arcano. Cosas así. Que la aventura no se acabe por levantarnos de la mesa.
Mi módulo perfecto es el que no es un módulo: yo solo pido ambientaciones y localizaciones. Los viejos suplementos de MERP, por ejemplo; en ellos se nos describía al dedillo un lugar, sus localizaciones principales, moradores, fauna y flora. Había tablas de encuentros, clima, tesoro. Y, al final, nos dejaban caer unas cuantas ideas (cada una en menos de un cuarto de hoja) para sesiones o pequeñas campañas.
Hay más aventuras en un lugar que en lo que tú me digas que debe pasar |
Así es, en general, como me gustan a mí.
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